"La Pregunta que va directa a nuestro corazón."
En cuantas ocasiones he escuchado la misma pregunta...
En cuantas ocasiones no nos sentimos merecedores de..... Amor, cariño, sorpresas, aliento, ayuda, autoestima...etc.
Nos
cuesta en ocasiones recibir y en otras nos protegemos tanto en nuestra
mente, incluso en nuestra ideas y nuestro corazón se cierra.
Situamos una barrera, un caparazón o un escudo infranqueable, para no dejar pasar el amor.
Los ángeles nos recuerdan que vivimos en la densidad terrenal y que no dejamos de ser humanos encarnados en un cuerpo denso.
A veces olvidamos esto y nos nos permitimos nuestros propios errores.
Tratamos
de evadirnos y buscar en nuestro propio interior, ya que creemos que la
solución o el desagravio esta en nuestro mundo externo.
Nos
somos conscientes de que la naturaleza humana es cambiante y no podemos
controlar nada, menos aun las circunstancias externas a nosotros.
Cuando canalizo a los ángeles, los primero que siento es: Paz dentro de mi corazón.
Esa
Paz que no procede de fuera, de ninguna parte, si no que te llena desde
dentro, no sin olvidar que sigo siendo humana y que este estado
de vibración no es continuo ni en todos los momentos del día.
Siempre que alguien solicita que canalice para el o ella, afirmo lo mismo a la persona que tengo delante de mi.
Los ángeles no te van a juzgar, no son jueces, son ayudantes terrenales y espirituales.
Al final siempre suele suceder la misma pregunta.
La misma cuestión precisamente puesto que no dejamos de ser humanos y al mismo tiempo es una gran suerte participar de serlo.
¿Los ángeles me quieren.?
La respuesta es su muy simple.
Los ángeles viven y están en tu corazón, por lo tanto siempre te manifestaran desde tu interior hacia ti mismo, ese amor.
Curiosa nuestra trayectoria humana, que difícil es buscar en nuestro corazón y que fácil es pensar con nuestra mente.
Dejemos
pues, que la energía angélica, que vibra en nuestro interior desde
eones de luz, salga libre, pura y amorosa para cubrirnos a cada uno de
nosotros mismos desde nuestro corazón.
Solo tenemos que descubrirla, paso a paso, y entonces:
"La energía
del ángel, la mayoría de las ocasiones poco visible, que esta en tu
propio corazón, llega, lo toca y lo mima fuertemente y se va de
puntillas sin hacer ruido.
Ese es el gran milagro interior para nosotros mismos.
Somos AMOR, estamos hechos de AMOR.
Henanael.
No hay comentarios:
Publicar un comentario